Familia Yunes Zorrilla, anfitriones de lujo.

Por Miriam Gracia Magaña

Don José Yunes Suárez, fue el perfecto anfitrión en su rancho San Julián en una comida para festejar los 40 años de su hijo mayor, José, en compañía de sus otros herederos Adriana y Ramsés, no dejo que nadie estuviera mal atendido por el contrario, las finas atenciones de la familia Yunes Zorrilla son de todos conocidas. El menú consistió en lasaña, medallones de res con verduras al vapor a las hierbas finas, pastel casero además de una rica barra de postres dulces, ácidos y picositos, como picosos fueron los encuentros entre algunos actores políticos asistentes, eso sí, todo entorno al patriarca de la familia Yunes Zorrilla. Javier Duarte de Ochoa sentado al lado del poderoso Secretario de Desarrollo Social, Ernesto Cordero Arroyo, amigo entrañable del festejado desde que fueron compañeros en el ITAM, confió a esta reportera que si bien es cierto su corazón late como cualquier mexicano por suceder a Felipe Calderón Hinojosa como candidato del PAN, también es sumamente precipitado hablar de eso en estos momentos. Mientras que el cordobés llegó en compañía de Salvador Manzur Díaz, quien comentó que el punto de acuerdo que presentó la semana pasada en la Cámara de Diputados sobre la reclasificación de las tarifas eléctricas para el Estado de Veracruz, seguirá siendo tema central de su agenda legislativa; de Edgar Spinosso, Erick Lagos y Antonio Gómez Anell, todos ellos venían recién llegados de la Sierra de Zongólica en donde estuvieron inaugurando la primera antena de telefonía celular. El Secretario de Desarrollo Social del gobierno del estado de Puebla, Javier López Zavala, llegó asistido de numerosos “ayudantes”, a diferencia de Ernesto Cordero y de Virgilio Andrade Martínez, Consejero Electoral del Instituto Federal Electoral y amigo de Pepe Yunes desde que ambos estudiaron juntos en el Instituto Tecnológico Autónomo de México. Sin embargo y pese a su gran cuerpo de seguridad, el “delfín” del gobernador poblano y el más viable candidato a la silla que hoy ostenta Mario Marín, fue accesible y sin poses. Adolfo Mota Hernández a quienes algunas llaman “el abogado del diablo”, por intentar salvar causas perdidas, fue uno de los más apapachados, el talentoso coatepecano sigue demostrando su valía pero sobretodo su nobleza al arropar a sus amigos. El diputado Joel Arcos nuevamente demuestra que es y será factor de decisión en lo que se avecina el próximo año, mientras de manera más discreta Víctor Arcos teje fino algunas alianzas políticas, ambos hermanos están cerca del poder y eso es innegable. Uno de los encuentros que llamó poderosamente la atención es el de Jorge Carvallo Delfín y Héctor Yunes Landa, ambos políticos experimentados no dejaron pasar la ocasión para platicar largo y tendido lejos de los demás invitados, mientras miradas curiosas los observaban detenidamente. Julio Hernández y Jesús Cienfuegos, diputados locales fueron discretos en su presencia. Una larga fila de invitados solicitaron tanto a Pepe Yunes Zorrilla como a Javier Duarte de Ochoa, empleos, recomendaciones y fotos, todos querían tomarse una fotografía con uno y con otro, cual estrellas de cine. Ricardo Ahued, Fidel Kuri Grajales, Eduardo Andrade Sánchez, Domingo Alberto Reséndiz fueron algunos de los invitados que más saludos recibieron. El Director General de MILENIO EL PORTAL, Alejandro Montano Guzmán estuvo acompañando un rato al festejado y se despidió para estar al lado de su hermano Martín, quien continua ingresado en el Centro de Especialidades médicas, a donde llegan todas las oraciones de quienes estimamos a la familia Montano Guzmán. Carlos de Jesús Rodríguez, José Ortiz Medina, Juan Antonio Nemi Dib, Orlando García Ortiz, Felipe Hakim Simón y Marcos Cruz Morales "El Tlacuilo", compartiendo la sal y la pimienta en sus comentarios, por cierto se notó la ausencia de nuestro querido maestro y jefe, Sergio González Levet. Guillermo Zúñiga Martínez, disculpando a su hijo Américo, por quien todos preguntaban. El oso de la tarde se lo llevó Iván Hillman Chapoy a quien nuevamente le quitan la silla… bueno al menos eso se pensó porque cayo sentado al suelo, provocando comentarios maliciosos. Eso sí, la comida de Pepe Yunes fue el marco perfecto para demostrar además del cariño y respeto que goza tanto él como su familia, que es un factor de unidad de los “fidelistas” y de todos aquellos personajes políticos tanto del ámbito estatal como nacional.