Dalia Pérez Castañeda- mujer integra

Por Miriam Gracia Magaña

Criticada por muchos, entre ellos, quien esto escribe, la diputada Dalia Pérez Castañeda ha terminado por poner un tapón en la boca a quienes a la ligera hemos cuestionado su hacer y proceder. Congruente como pocos diputados, se ha negado a ser comparsa fácil como ocurre con otros compañeros suyos del Congreso que pertenecen al PRI en aras de conseguir otros puestos de elección popular. La dama ha enarbolado y apoyado a organizaciones que luchan por los derechos de la mujer y de la comunidad gay. Ahora nuevamente vuelve a mostrar madurez cuando asegura que con cartilla o sin cartilla de salud, los jóvenes veracruzanos están teniendo actividades sexuales. Esto es un hecho, quienes no quieran admitirlo es por torpeza o por ignorancia, ambas reprobables en una legisladora como es el caso de Elvia Ruiz Cesáreo, quien nuevamente adopta actitudes frívolas y serviles que en nada ayudan a su ya de por sí deteriorada imagen. Pérez Castañeda como toda mujer y madre comprometida con la educación de los hijos e hijas, se mostro a favor de proporcionar a los jóvenes todo tipo de información en las cuestiones sexuales, ya que esto evitaría el gran números de casos de chicos y chicas que padecen enfermedades de transmisión sexual y de embarazos no deseados. “Cualquier mecanismo que acerque a las mujeres de cualquier edad, incluyendo a las menores, información y elementos para el cuidado de su salud reproductiva y sexual es bienvenido”, asegura la diputada Pérez Castañeda. Muy bueno sería que la diputada Elvia Ruiz Cesáreo recibiera cursos de estos temas en el Centro de Estudios Sociales XochiQuetzal, el cual esta comprometido a promover la salud sexual y la salud reproductiva, reconociendo la importancia del placer responsable y el aprendizaje desde y para la sociodiversidad, entendida ésta como el respeto y el derecho a la diferencia. En este centro hay profesionales que en mucho ayudarían a la diputada por Orizaba, quien de manera infantil asegura que el gobierno federal a través de la Cartilla Nacional de Salud para niños y niñas de 10 años, promueve las relaciones sexuales. Es como si se asegura que un hombre o una mujer sólo por el hecho de estar casada no pueden ser infieles. ¿O usted qué opina?.